"El calor, la charla que no fue y el sapo"

 Es una noche ardiente es Buenos Aires la sensación térmica aún no bajo de los 30 grados y Paloma se siente morir.

En un intento desesperado para calmar el calor agobiante sale al balcón a fumar un cigarrillo y es ahí donde su corazón da un vuelco y empieza a acelerar cuál rugido de león su palpitar.

Quiere devorarlo todo.

Las calles de Buenos Aires con todo y sus recuerdos.

Alguien falta en esa esquina y ese alguien jamás volverá.

-Enero maldito, casi tan perverso como diciembre.-Murmura mientras intenta calmar una desesperada lágrima recorre su mejilla.

Mientras se seca la lágrima siente la opresión en el pecho que hace días la persigue.

Exhala el humo y se toca el pecho izquierdo casi como una caricia, su seno es pequeño y no esta orgullosa dé ello pero lo supera con rapidez, cierra los ojos y lo ve en la esquina.

Ahí esta Máximo.

Siente su asqueroso desodorante pero ya dejo de ser asqueroso ,todo con respecto a él ahora se volvió casi sagrado para ella.

Paloma recuerda un momento con él, su gran amor leyendo a Baudelaire y quiere besarlo, sentirlo en ella una vez más pero eso esta negado hace casi un año.

-¡Maldita sea la hora!- Dice arrojando el cigarrillo por la ventana y volviendo a su asfixiante sala.

El televisor esta apagado, el ventilador prendido y las luces son bajas todo el día al sol le había provocado a Paloma una fotofobia con una migraña que la llevaba a alejarse de todo aparato electrónico o pantalla, mañana terminaría ese pdf y revisaría a fondo su home banking hoy no.

Su cabeza daba vueltas su corazón quería salirse de su pecho y en sus ojos solo había tristeza.

Su alma pendía de un hilo.

Su corazón estaba demasiado débil como para intentar alguna acción hasta con sus amigas. Guardarse era la mejor opción, sería como una cuarentena autoimpuesta por un día o dos.

Lo que ella tardará en volver a ser ella, lo que tardará en vaciar su alma llena dé lágrimas.

Se acostó en el sofá y respiro hondo su cuerpo temblaba sus manos transpiraban todo se volvía gris.

Tuvo miedo pero recordó como calmarse, se calmo lo suficiente para ponerse en pie e ir a la cocina por un vaso de jugo.

Mala idea.

Al terminar de llenar el vaso vio claro como el día un sapo y en la boca del animal una foto suya.

Era una visión tan clara que arrojo el vaso partiéndolo en miles pedazos para espantar la visión y desaparecerla sin darse cuenta que  un trozo dé vidrio le rozo el pie cortándolo en una pequeña parte.

Otra cicatriz...

Y rompió en llanto, no por dolor físico sino mental.

Hacía ya un año.

Un año desde que se quedo "viuda".

Su cuerpo empezó a convulsionar nuevamente agarro el celular y le escribió a su amiga lo que había pasado con tanta mala suerte que lo escribió a tres personas más.

Solo una debía saberlo pero entre espasmo y lagrimas Paloma logro borrar los mensajes de más y dejar ese solo.

Como una niña sentada en el piso con ojos llorosos y un corte en el pie empezó su viaje interior.

Un año desde que salió a comprar y alguien dijo "Flaca" ...Paloma estaba acostumbrada a llamar la atención y que le dijeran flaca no era nada nuevo ni ofensivo para ella solo ignoraba al que no fuera conocido y algunas veces a los conocidos también y seguía su ruta.

Pero esa tarde dé enero no.

El "Flaca" sonaba insistente hasta que giro su cabeza buscando alguien conocido y no encontró a nadie o eso creyó :un hombre con lata de cerveza era el que decía "Flaca" para Paloma era un extraño. 

Petizo muy moreno y con una lata de cerveza a la tarde no era de su grupo.

No sobra decir que el grupo de Paloma era harto reducido porque sus gustos y sus estados de animo eran difíciles e contener y soportar para la mayoría.

Ella decía que la vulgaridad estaba en cada esquina esperando atacarnos con sus ficticios orgasmos de reguetón y frases de Coelho; que el mundo conspiraba en contra de toda ética.

Que la decadencia humana era cada vez peor y solo bastaba mirar al rededor para darle la razón.

Mujeres descuidadas con vello en las piernas y las axilas defecando en calles para una revolución anti patriarcal que ella nunca sintió ni de lejos en sus cuatro décadas de habitar esta infame tierra.

Hombres que usaban crocks y bermudas en pleno centro porteño yendo a los tribunales como si fuera una playa.

Pircings y tatuajes de lo más comunes en las personas más comunes.

Era perdida sin intelecto.

La pobreza llevada a los limites.

Y tantas otras filosofías "Palomescas" como decían sus amigas que más que filosofía era una daga filosa en extremo.

Para terminar diciendo a aquel hombre -¿Yo?-

-Si Flaca sos vos?¿ Paloma como estas? Soy yo Jerónimo.-

-Jerónimo (un antiguo amigo de ella y más amigo de Máximo, habían pasado casi veinte años desde la ultima vez que lo vio imposible reconocerlo) ¿Cómo estas?-

-Bien ahora me voy a encontrar con Israel a tomar unas cervezas.-

-Ah siguen igual jajajaj no te reconocí.-

-Sin embargo vos estas igual Paloma físicamente.-

-Gracias mentiroso.-

Y así una charla superflua siguió unos diez minutos.

Pero Paloma no pudo contenerse sabía o le habían dicho hacía un tiempo atrás que Máximo estaba enfermo y grave y soltó la pregunta como un látigo.

Jerónimo levanto los ojos al cielo y dijo sabía que era mala idea pararte para hablar, sabía que me ibas a preguntar por él. ¿Qué mierda tenían ustedes dos? Más allá de sus amores de adolescentes, dé su gusto por los libros eran tan diferentes vamos Flaquita ...

Dijo Jerónimo pero la Flaquita que era Paloma podía tener una mirada demasiado persuasiva por no decir maligna.

-Máximo murió hace... estaba muy mal...no hablaba con nadie, no respondía ...pesaba ...kilos...falleció y... ¡Paloma Paloma!-

Paloma había escuchado partes de todo lo que dijo Jerónimo y estaba más pálida que la luna de agua, se había quedado aturdida en un momento que hubiera sido eterno si Jerónimo no la despierta.

Tomo aire respiro saludo y se fue.

Hizo todo lo que tenía que hacer y volvió a su casa.

No recuerda como por más que lo intente, no lo logra.

Así dé complicada es la mente de Paloma cuando se pone de acuerdo con su corazón para borrar recuerdos.

Luego toma su celular y le escribe al único contacto que se acordaría de Máximo y que lo había conocido en persona.

Y de ella solo recibe una pregunta tan idiota como hiriente -¿Le pediste el teléfono a Jero?.Simplemente le manda un audio diciéndole para que lo quería si ella estaba tan superada ¿Qué quería de un negrito chupa birras ella la coaching en salud? .

Y se lo avisa a una verdadera amiga esta la intenta consolar y Paloma solo reacciona diciendo que es bueno que Gonzalo este de vacaciones porque no sabría como manejar una charla con él a lo que su amiga le dice que si, que lo evite.

Paloma era muy damisela en apuros pero solo con Leónidas con Gonzalo trataba de ser fuerte y contenerlo a él.

No era que lo viera endeble sino que era otra cara de una moneda  y le gustaba.

Pero ahora Paloma era "viuda" ella se auto proclamo así.

Porque así se sentía.

Muerto él muerto el amor.

Muerta la inmortalidad.

En ese micro segundo estaba hoy Paloma.

Tratando de volver al pasado y salir cinco minutos antes o después para no encontrarse con Jerónimo para seguir creyendo que Máximo vivía y habitaba la tierra feroz e insoportable que ella. De distinta manera tenían tanto en común eso era algo que ni ellos sabían como había pasado, ni se habían puesto a averiguar se sentían desdichados pero felices al estar juntos.

Por más que Paloma moviera el entrar y/o salir de casa cinco, veinte minutos como en tablero de ajedrez no lograba sacarse una imagen dé la mente.

Que Máximo no había acudido a ella.

Que este año el día se cumpleaños no tendría que mirar el teléfono esperando no oír nada del otro pero sabiendo que era Máximo.

En realidad eso había dejado de ocurrir hacía casi cinco o más años atrás y solo deseo volver volver volver a atrás. Volver a sus brazos y huir a su lugar de ensueño un lugar tan remoto que jamás llegarían vivos.

Aquel Edén propio que en noches habían imaginado mientras se besaban y Paloma año tras año lleno de muebles y artefactos en solitaria perseverancia.

Pero él ya había llegado y lo había hecho solo eso era tan de él como no pedir ayuda.

Como no decirle nada a ella que le hubiera dado la vida con tal que él la recordara.

Se dejaría morir...lo decidió súbitamente el sapo que había visto era un símbolo de brujeria y ella ya estaba agotada.

Ya no había Gonzalo ni Leónidas ni Gael ni Curtis ni Damián y mucho menos Máximo.

Su cuerpo ya estaba en proceso esta angustia, esos espasmos, esos nervios la consumían cada vez más ,ella no era Batichica ni Gatubela para andar saltando y dando puñetazos a todo aquel que se cruzará en su camino.

Los héroes tenían un propósito ella no.

Ya no.

La mediocridad la rodeaba y ella solo podía hacer la vista a un lado.

Sentía en sus ojos el calor de un millón dé soles quemándole y las lágrimas saladas solo daban paso a espasmos.

Que año tan ingrato aunque  ya estaba en otro.

Recordó las dolencias y tristezas que paso.

Ninguna era tan grande como la perdida de Máximo pero todas dolían ,punzantes en su corazón...lleno de cicatrices.

Lloraba sentada en el piso, rodeada del celular y los cigarrillos pensando la razón de que casi todo se le escurriera como agua entre las manos.

Y no encontró nada...

Máximo muerto ¿para que Paloma seguiría en este hostil mundo sin él?

-¡¡¿Para que?!!-Grito al cielo raso.

Pensaba en tomar dé la cocina la cuchilla o del cuarto las pastillas y acabar así con todo. El calor y la tristeza la tenían dominada.

De pronto entre temblores de sus manos sintió un aroma fuerte nítido en sus fosas nasales.

Era el desodorante de Máximo y lo vio tal como la última vez ahí estaba.

-Hola hermosa estoy pegajoso, pero vi que te acostumbraste a ese tipo de piropos.-

Dijo sentándose al lado dé ella y tomando su cabeza para colocarla en sus piernas.

-Ay mi maldita mente juega conmigo primero el sapo ahora vos.-

-No, soy yo Paloma no es tu mente.-

-Máximo ingrato me dejaste sola.-Dijo golpeando el pecho de él con toda la furia que tenía-Te fuiste, estabas mal y no pediste mi ayuda yo hubiera dado mi vida a cambio de la tuya y lo sabías desde siempre y yo no miento ni me escondo. Pero vos el señor introvertido se guardo del mundo. Te odio tanto!-

Grito Paloma.

-Si lo hice porque si me hubieras visto te hubieras deprimido, hubieras caído en una depresión quizás peor que esta y no quería. Te observe largo tiempo.-

-Chusma.-

- Te vi con personas hombres de política, hombres tan diferentes a mi y me gustaba verte con ellos, yo nunca más iba a poder tocarte y vos ahí llevando y trayendo tus encantos. Me divertía pensar que pasaría si hubieras tenido una foto mía en tu celular y ellos con sus aires dé señores la hubieran descubierto...vamos Leónidas se dejo estar pero era un galán de novela. Jajjajajaj.-

-Y con esa misma maldad de mierda actuaba el muy forro.-

-Ay tenemos a la señorita ya le exploto el barrio ¿segura no queres una quilme?-

-Máximo no seas hijo de puta.Dios mi cabeza me juega las bromas más pesadas debo salir dé este ensueño perfumado.-Dijo sin voz Paloma, con la respiración entrecortada y el corazón latiendo a mil por segundo.

-No Palo quédate Flaquita así te sacas todo, vamos date el gusto conmigo.-Dijo Máximo con los ojos llenos de lágrimas de resignación.

-Mi amor ¿sabías que en antiguas culturas las mujeres se tiraban a morir en la sepultura de sus esposos?-

-Si, eran culturas arcaicas y lo hacían porque sin el varón la mujer no podía hacer nada.-

-Yo hubiera hecho eso por amor. Únicamente por amor a vos estupido, pero te encerraste la vez que fui tu padre me dijo que estabas dormido.-

-Lo sé Flaquita.-

-¿Y no te dio curiosidad saber que quería?-

-No. La curiosidad siempre fue tu fuerte no el mío. Recuerdas?-

-Sí pero...-

-Ya estaba enfermo, demacrado quería que me recordaras así y señalo la remera con el logo de Sepultura.-

-Yo te habría salvado mi amor.-

-Siempre en guerra con la vida ni Gonzalo te pudo quitar eso veo. Fracasaron todos en eso en realidad fracasamos ostentosamente. Paloma mírame -dijo mientras tomaba la cara de ella y la ponía a su altura para quedar ojos con ojos.- Yo sé que ya nadie te dedica himnos de otros autores pero sé que no puedes leer ese himno sin pensar en mi, ese fue mi regalo y te lastima, un regalo que termino siendo una maldición te di. Siempre un cobarde tenés razón .-

-Cuando Jero me conto lo tuyo solo el libro tenía. Nunca tuvimos una foto, nunca nada. Siempre tan pulcros como dos amantes siendo que fuimos un universo paralelo.-

-Paralelo exacto creamos hasta un idioma ¿recuerdas? Mi Leeelo multipase?-

-Mi amor -Dijo Paloma llorando- Es el día de hoy que veo Gladiador y te veo a vos.-

-Por el parecido con Crowe seguro que no. Yo siempre fui feo. Eso lo superaste muy bien solo uno o dos feos después de mi, mi niña ahora es una mujer exigente.-

-Y esta mujer exigente quiere que la sueltes o la lleves con ella.-Dijo Paloma cerrando los ojos y moviendo la cabeza como una niña haciendo un berrinche.-

-No cambias más. Tus letras, tus berrinches, tus botas altas....Dijo con ternura Máximo.

-No y jamás lo haré.-

-Ya sé tus principios y tus ideales. Sin embargo te vi con Damián era sorprendente verte con alguien dé          esa moral política y que rápido sucumbiste al hechizo dé las redes sociales y  las fotos. Siempre una ególatra.-

-Ahora no queda nada de esa mujer, me duele la cadera, tengo el pie lastimado y vos sos un producto dé mi delirio.-

-Vi también que has caído y con mucha gracia en el capitalismo y en eso solo tengo que felicitarte...-

-No tengo un puto centavo revisa-Dijo arrojándole el celular...

-Y desconfías dé todos y de todo. Eso también es mi culpa jamás te enseñé nada útil para la vida ¿Cómo hubieras terminado?.-

-En nuestro lugar solos los dos abrazados.-

-Hasta ayer manejabas cifras en dólares y conmigo pan y cebolla...tan especial soy ¿Vengo de un abismo?-

-¿Que más da ?- Respondió ella siguiendo el verso.

-Basta Paloma no rompas tus alas, yo ya me fui y volví para que no cometas una locura. Ahora tenés amigas y con estas no te peleas...o sea vos no te peleas con otras mujeres. Es un enorme logro. Ahora haces yoga te pintas las uñas.-

-Si mañana descubriré el quinto elemento Máximo.-

-Y tu sarcasmo sigue intacto y ha mejorado ¿a quien le debo el honor?.-

-Al mundo hostil, a ese lunar que pocos ven y siento que hace eones esta ahí y mi cuerpo vino a usurpar su lugar y a este cuerpo que llora su mal augurio.

-Paloma siempre fuiste única con todas tus tristezas con cada una de tus perdidas. La vida te castigo tanto.-

-He perdido demasiado hasta amigos además de mi familia Máximo no fueron buenos tiempos.-

-Lo sé estaba acá mientras eso pasaba ¿nos vimos o ya lo olvidaste?. Paloma no quisiste llorar y yo por una vez te pude poner el hombro para que llores y vencí a tu orgullo por creo quince segundos. Y estaba vivo. Recuerdo ese día y algo se me rompe.-

-Era dé noche. Siempre fuimos nocturnos.-

-No siempre a veces nos teníamos que fugar antes y  Febo, digo el sol estaba arriba...menoría Paloma.

-Si ahora recuerdo. Siempre dos fugitivos aunque nunca supe de que y vos tampoco...creo que de nuestros propios demonios...o no.-

- Pero fuimos una inmensa fuente de energía, imparable éramos como el clima sino ¿por que sé tanto de ti? Eso me tiene viéndote y viéndote. Sé todo dé vos . Vivo a través tuyo.-

-¿Me llevaras con vos? Ahora no tengo a nadie ;el mundo se ha hartado dé mi. y yo de él. Estamos a mano.-

-No puedo y no lo haría si pudiese.-

-El mismo egoísmo de siempre yo doy todo me entrego en cuerpo y alma y recibo migajas capaz por eso huíamos me tenías escondida.-

-Si por mi egoísmo nunca quise compartirte con nadie y después te perdí aunque Paloma Donnante vence aunque sea en la mismísima linea de meta. ¡Volví de la muerte para darte un beso y sacar de tu cabeza esos pensamientos negros!¡Negros como tus ojos!-

-Claro como no ...Dijo Paloma con un gesto en la boca que parecía un pucherito de una niña.

-Mi mujer, mi niña mi Paloma mi gavilán has ganado en todo y todos volvemos a ti. Memoria Paloma ...los vi volver a todos hasta a la fortuna....-

Dijo besándola fuertemente en los labios.

Paloma despertó en el suelo con la cabeza hirviendo en fiebre, el cuerpo adolorido por estar en el suelo. 

El olor se había esfumado Máximo también tenía el rasguño del vidrio en el pie y los ojos cansados dé tanto llorar.

Las manos entumecidas y el corazón seguía una marcha aún muy acelerada.

Mojo su sien en el lavabo del baño y se fue a la cama donde agoto sus fuerzas y sus lagrimas...Lloro lo perdido, lo encontrado, lo descubierto y lo ignorado hasta quedarse dormida.

Se despertó débil pero con la voz de Máximo repitiendo :
Todos volvemos.

Nota de la autora:

Mi amor nunca moriría.

Mi sed nunca será saciada.

Estoy viva y tu no.

Jamás tendré suficientes letras para invocarte.