lunes, 13 de junio de 2011
"El regresado"
Hoy he vuelto de mi larga estadía en la Muerte.
No se asusten no soy el Ave Fénix ni nada parecido.Solo soy un hombre que regreso,no por haberle ganado,no por haberla vencido,no por buena conducta,solo regresé y con eso me basta.
Los peores tormentos sufrí en las manos de El Diablo y los horribles claustros de mis compañeros (los muertos)he mirado en las garras de La Muerte.
Como he vivido(muerto)en aquel infierno donde todo era a gusto y placer de El Diablo y La muerte que allí gobernaban con mano de hierro a mi y a mis compañeros,esclavo fui de ellas(son mujeres ambos tanto El Príncipe de las Tinieblas como La Parca)¡cuantos dolores y cuantos arrepentidos vi!
Ahora en su juego me han libertado,me han devuelto a la vida justo donde me la habían arrebatado.
¿Por que lo han hecho?...
No lo se y tampoco estoy seguro de querer saberlo.
Regrese nada ha cambiado,mas que mi mente allí las pervesas han dejado su huella imborrable.
Las caricias de La Muerte y el deseo de La Parca brotan como manantiales en mi y seguramente por eso han dejado semejantes recuerdos en mi mente y en mi alma.
Muerto estuve,vivo estoy.
¿Pero que precio tengo que pagar?
Vivir así con los recuerdos de esas criptas donde me azotaron y desgarraron mi piel a caricias maléficas,donde los recuerdos de esta tierra me eran preciosos y ahora con esos mismos recuerdos me reencuentro mas mi alma se llena de temor al recordar los nuevos recuerdos incrustados en todo mi ser.
¡Crueles!
Sin embargo a nadie he podido contarle mis penurias en el mundo de ellas,pues en este tiempo nadie me ha visto morir.Nadie.
Me veo obligado a dejar esta carta para explicar mis penurias,no tengo otra salida quizás algún día la encuentren y no piensen que estoy loco.
Allá donde no es arriba ni es abajo y solo es allá estuve yo por mas de veinte años vi amigos sufrir mas torturas que las que me tocaran a mi,mi piel fue arrancada y vuelta a poner todas las noches que ella(La Muerte)lo deseara,mis ojos fueron cegados por la mirada de la otra cómplice,mis pies descalzos caminaron sobre punzantes picos de rocas y miles de torturas mas que no quiero recordar.
Solo una cosa se ahora estoy vivo.
Pero muerto estuve.
No se asusten no soy el Ave Fénix ni nada parecido.Solo soy un hombre que regreso,no por haberle ganado,no por haberla vencido,no por buena conducta,solo regresé y con eso me basta.
Los peores tormentos sufrí en las manos de El Diablo y los horribles claustros de mis compañeros (los muertos)he mirado en las garras de La Muerte.
Como he vivido(muerto)en aquel infierno donde todo era a gusto y placer de El Diablo y La muerte que allí gobernaban con mano de hierro a mi y a mis compañeros,esclavo fui de ellas(son mujeres ambos tanto El Príncipe de las Tinieblas como La Parca)¡cuantos dolores y cuantos arrepentidos vi!
Ahora en su juego me han libertado,me han devuelto a la vida justo donde me la habían arrebatado.
¿Por que lo han hecho?...
No lo se y tampoco estoy seguro de querer saberlo.
Regrese nada ha cambiado,mas que mi mente allí las pervesas han dejado su huella imborrable.
Las caricias de La Muerte y el deseo de La Parca brotan como manantiales en mi y seguramente por eso han dejado semejantes recuerdos en mi mente y en mi alma.
Muerto estuve,vivo estoy.
¿Pero que precio tengo que pagar?
Vivir así con los recuerdos de esas criptas donde me azotaron y desgarraron mi piel a caricias maléficas,donde los recuerdos de esta tierra me eran preciosos y ahora con esos mismos recuerdos me reencuentro mas mi alma se llena de temor al recordar los nuevos recuerdos incrustados en todo mi ser.
¡Crueles!
Sin embargo a nadie he podido contarle mis penurias en el mundo de ellas,pues en este tiempo nadie me ha visto morir.Nadie.
Me veo obligado a dejar esta carta para explicar mis penurias,no tengo otra salida quizás algún día la encuentren y no piensen que estoy loco.
Allá donde no es arriba ni es abajo y solo es allá estuve yo por mas de veinte años vi amigos sufrir mas torturas que las que me tocaran a mi,mi piel fue arrancada y vuelta a poner todas las noches que ella(La Muerte)lo deseara,mis ojos fueron cegados por la mirada de la otra cómplice,mis pies descalzos caminaron sobre punzantes picos de rocas y miles de torturas mas que no quiero recordar.
Solo una cosa se ahora estoy vivo.
Pero muerto estuve.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)