"Castigo"

Tengo un deseo enorme de ser la villana y castigarte.
De ser juez, jurado y verdugo.
Pero solo escucharas mi diatriba.
Y te callaras.
Porque yo lo digo.
-¿Entendiste?-
Has estado quieto tu el gran peregrino del mundo,has estado en el calor cuando amabas el frío.
Te has conformado.
En tantas cosas.
Tienes una felicidad mediocre.
Tu el gran inconforme.
¿O me vas a decir que es tu última oportunidad para no ser lo que tu anhelabas y ahora temes a la soledad?
El ermitaño.
¿Los recuerdos no te avasallan?
¿Dormis tranquilo sobre ese pecho?
Antes no dormías.
¿Que ves al mirarte al espejo?

Porque si lo tuyo es felicidad ... creo que por ahora en realidad como siempre prefiero la euforia.
Ya ni recuerdas que es eso.

Como olvidaste tus pasos y paseos.
Eres un animal domesticado.
Lo veo en tus ojos.
Yo fui la única que te sostenía la mirada en todo momento,de seguro también eso habrás olvidado.
Si hubieras sido pajaro ¿te hubieras mutilado así las alas?.

Porque oh bestia indómita que ha quedado de ti más que despojos y algún recuerdo de sus pasadas glorias.

Eres el héroe en los tiempos de paz absoluta nadie se acuerda de ti.

Eres inservible porque ya no eres ni decorativo.

No hay estatuas erigidas en tu honor.

No hay lamentos más que los tuyos.

¿En esto querías convertirte?.

No, yo sé muy bien que no.

Si tanto temes deberías haberme entendido en su momento más no lo hiciste.

Y puede que esto sea una pasada de factura muy muy tardía pero yo lo veo como un castigo.

Que tu mismo te has infligido y yo lo gozo de retorcida manera en un mundo donde la crueldad es el pan dee cada de día.

Y el mérito ya no cotiza.

Este será tu castigo.

No reconocerte en el espejo de la mediocridad que te has formado  tu solo.

O quizás no tan solo.

¡Disfrutalo!.

¡Gozalo!.

¡Bebé de él cuál ambrosia!.

 Y sigue continua más no te acerques tanto a mi persona yo sigo siendo una ninfa lunar. 

Yo no muté en nada.

Y si lo hubiese hecho no te daría explicación alguna.

¡Aquí siempre fuiste tu tu y tu!.

Ya no quedo nada de ti ni de ti y menos de ti.

El veredicto ese ese.

La sentencia es en lo que te has convertido.

Y son mi deleite.