Se enferma de soledad.
Se enferma de malas compañías.
Se enferma.
¿Qué hago?
Estoy al borde del colapso escribiendo con los ojos bañados en lagrimas y mis manos tiemblan por la desesperación que ciertos dolores han causado en mi corazón.
¿Qué hago?
Guardo el corazón.
Si , es la única salida viable para él y para mi.
Lo pongo en pausa;en una especie de cuarentena.
Dentro de él están mis sentimientos, no me volví una roca.
Siento, sufro y rio.
Pero no al cien por cien.
Refugio un sueño y mis esperanzas en una cajita de cristal junto a mi corazón.
Están semi adormilados y así los mantengo.
Tengo mis metas claras y a ellas me aferro.
Como a una soga se agarra un montañista.
Obligo a mis lágrimas a secarse, a mis decepciones a desaparecer.
Inhalo.
Exhalo.
Respiro el aire húmedo que corre por la ciudad.
Bloqueo los recuerdos.
Hasta los felices.
No dejo que nadie entre en mi.
Me niego a buscar a alguien nuevo.
Ha sido demasiada crueldad,demasiado llanto,demasiado dolor,demasiado desencanto como para dejar entrar en esa especie de fortaleza a alguien nuevo.
El corazón muere de una muerte lenta...y por eso lo aíslo de todo lo que pueda herirlo mortalmente.
Lo preservo y me auto preservo con él.
Es probable que también salve a otros haciendo esto.
Yo no logro vivir un amor pobre, carente de sorpresas, un amor simple.
Yo ardo y quiero que ardan conmigo.
Yo vuelo y necesito que me dejen expandir mis alas y expandan las suyas.
"No me sirve" escribió Mario Benedetti y cuanta razón tiene en ese poema por más que no se refiera justamente al amor de pareja.
Habla de amor al fin.
Y todo amor debería ser así con lo que sirve y no con lo que no sirve.
Con esas cosas que soportamos porque tenemos que soportar.
¿Tenemos?
El amor se construye de a dos.
Se debe ceder y demás.
Pero cambiar mi existencia y mi esencia para complacer...volverme una simple, no.
No lo acepto.
No debo aceptarlo.
No quiero aceptarlo.
Eso no es amor.
Tampoco es amor el conformismo, el estar con alguien antes de estar sola,por más que ese alguien solo sirva para ocupar un lugar en la cama.
El corazón no es dominado por la mente pero se puede intentar.
Y hasta lograr mientras las tentaciones ( por llamarlas de algún modo) no nos hagan ceder.
Se respira más calmada la humedad, el sexo complementa pero no llena.
Las esperanzas se debilitan.
La mente se nubla.
Voy en caída libre cayendo ...
Cayendo.
Es ahí donde lo que se había puesto hace tiempo en cuarentena sale como explosión.
Todo es gris.
No hay salida.
Se vive en el desamor.
En el llanto y la sensación de caer hacía un vacio es tangible.
Son las carencias.
Las múltiples desiluciones,las mentiras venidas de norte a sur.
Las humillaciones, los sinsentidos,.
Todo.
Que es parte de la vida; si.
Que de eso se aprende; tal vez.
Quizá mañana despierte y en mis ojos no haya lágrimas y mi corazón exhale todo lo putrefacto del mundo y se reinicie.
Por ahora debo calmarme.
Acostumbrar a mi mente a no pensarte.
O solo dejarla vagar por tu recuerdo( solo los felices) de vez en cuando para que relaje de un día agitado.
A mi corazón hacerlo sentir lo poco bello que hay en el mundo y enclaustrarlo en mis metas.
Orden.
Calma.
Así no seré una roca.
Ni seré una presa tan fácil para los depredadores.
El mundo esta lleno de ellos.
Yo lo he sido.
Ahora soy pasiva.
Estoy en una especie de sueño si lo quieren llamar así.
Sufro lo menos posible( y aún así es mucho más de lo que deseo y creo merecer).
Los cambios me afectan terriblemente.
Y este mundo ha cambiado y con él a sus habitantes.
Los veo irascibles.
Desdeñosos.
Mentirosos.
Insípidos.
Cursis.
Conformistas.
Agresivos.
Dependientes.
Egoístas.
Siempre hubo de todo pero están potenciados.
Los siento y me aparto.
Aparto mi sentir mi corazón esta en cuarentena en un sueño profundo.
Esperando...
Eso no es amor.
Tampoco es amor el conformismo, el estar con alguien antes de estar sola,por más que ese alguien solo sirva para ocupar un lugar en la cama.
El corazón no es dominado por la mente pero se puede intentar.
Y hasta lograr mientras las tentaciones ( por llamarlas de algún modo) no nos hagan ceder.
Se respira más calmada la humedad, el sexo complementa pero no llena.
Las esperanzas se debilitan.
La mente se nubla.
Voy en caída libre cayendo ...
Cayendo.
Es ahí donde lo que se había puesto hace tiempo en cuarentena sale como explosión.
Todo es gris.
No hay salida.
Se vive en el desamor.
En el llanto y la sensación de caer hacía un vacio es tangible.
Son las carencias.
Las múltiples desiluciones,las mentiras venidas de norte a sur.
Las humillaciones, los sinsentidos,.
Todo.
Que es parte de la vida; si.
Que de eso se aprende; tal vez.
Quizá mañana despierte y en mis ojos no haya lágrimas y mi corazón exhale todo lo putrefacto del mundo y se reinicie.
Por ahora debo calmarme.
Acostumbrar a mi mente a no pensarte.
O solo dejarla vagar por tu recuerdo( solo los felices) de vez en cuando para que relaje de un día agitado.
A mi corazón hacerlo sentir lo poco bello que hay en el mundo y enclaustrarlo en mis metas.
Orden.
Calma.
Así no seré una roca.
Ni seré una presa tan fácil para los depredadores.
El mundo esta lleno de ellos.
Yo lo he sido.
Ahora soy pasiva.
Estoy en una especie de sueño si lo quieren llamar así.
Sufro lo menos posible( y aún así es mucho más de lo que deseo y creo merecer).
Los cambios me afectan terriblemente.
Y este mundo ha cambiado y con él a sus habitantes.
Los veo irascibles.
Desdeñosos.
Mentirosos.
Insípidos.
Cursis.
Conformistas.
Agresivos.
Dependientes.
Egoístas.
Siempre hubo de todo pero están potenciados.
Los siento y me aparto.
Aparto mi sentir mi corazón esta en cuarentena en un sueño profundo.
Esperando...
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